martes, 29 de octubre de 2013

Cántico de la Sabiduría 9,9-11


“Contigo está la Sabiduría que conoce tus obras,
que estaba presente cuando hacías el mundo,
que sabe lo que es agradable a tus ojos,
y lo que es conforme a tus mandamientos”.
“Envíala de los cielos santos


Mándala de tu trono de Gloria
para que a mi lado participe en mis trabajos,
Y sepa yo lo que a Ti te agrada,
pues ella todo lo sabe y todo lo entiende.
Ella me guiará prudentemente en mis empresas
y me protegerá con su gloria.

Entonces mis obras te serán agradables”.

¡No al aborto y a la guerra!

martes, 22 de octubre de 2013

Devoción

“Verdadera Imagen del Sacratísimo 
Rostro de nuestro señor Jesucristo”.
Devoción de familia
Que durante más de 114 años, 
permanece en la familia Báez,
Romero Báez y Bazzani Romero.

Presumí que podría hacer una histórica 
reseña de familia.
Asumo que mi abuelita adquirió 
la imagen del Divino Rostro,
directamente de Roma o a través de la 
Iglesia de la Concepción, en Bogotá-.

Los custodios del lienzo de la 
-primera imagen del Señor-,
difundido y obsequiado como el 
Santo Rostro de Jesús en la imagen
del Velo de la Verónica, la consideran 
una reliquia (1898).
Se venera en Roma en la Basílica 
de la Santísima de San Pedro.

Cuando mi madre partió a una vida 
más digna, dejó plasmada su genética 
y personalidad en el corazón, 
sangre y espíritu de cuatro varones 
y cuatro mujeres, muchos jóvenes 
y tantos niños, que alcanzó, 
algo así como a una familia de 
setenta miembros o más.

Para la época en que partió de este nebuloso mundo, 
que ensombrece la vida de la humanidad, mi madre se 
sentía orgullosa por dejar tanta prole; 
ignoraba que muchos de sus descendientes lastimosamente, 
tendrían que formar parte de una humanidad y cultura en 
destrucción y que, indudablemente, es imposible 
trancar, la ruina moral.

La familia Bazzani Romero, a 2013, ha aumentado sus miembros,
dentro de quienes está mi nieta; ellos no tienen el conocimiento
de su ancestro, tal vez como lo sepa yo, respecto 
de mi abuelita Susana, veneradora del Divino Rostro del Señor.

Mi madre no sabrá lo que mi corazón refleja en este texto,
sin embargo, Dios lo sabe y ella, está con Él.

¡Mi madre fue un testimonio vivo de la existencia de Dios!
¡No a la guerra y al aborto!





sábado, 19 de octubre de 2013

Tesoros, vacaciones es acercarme más a la familia

        Porque el sol me alumbra 
                                            como vuestras risas...





Porque me alimento de
momentos de recreación
vivida, anteriormente.




Porque la distancia hace latir 
"mucho" más fuerte el corazón!

No a la guerra, ni al aborto!

martes, 15 de octubre de 2013

Dar y recibir

“Lo que das, te lo das. Lo que no das, te lo quitas”.

“Has de dar lo que recibes.
El conocimiento se recibe y se da,
 sino todo lo que aprendiste
no sirve de nada, se estanca y se pierde”.

GNR 221041
Con esta Oración matutina sabrás cuan grande es el Señor

Guárdame,
Señor. Quédate conmigo durante todo el día
y guía todas mis acciones,
mis palabras y pensamientos.

Guarda mis píes,
para que no anden ociosos,
sino que caminen al encuentro
de las necesidades de los demás.

Guarda mis manos,
para que no se abran para el mal,
sino para abrazar y ayudar a todos.

Guarda mi boca,
para que no diga falsedades
ni cosas indebidas
y no hable mal del prójimo.
Al contrario, que siempre esté dispuesto
para animar a todos y para bendecirTe a Ti,
Señor de la vida.


Guarda mis oídos,
para que no pierdan el tiempo
en escuchar palabras falsas o sin sentido,
sino que estén siempre atentos
a escuchar tu misterioso mensaje,
para cumplir también hoy tu voluntad.
Que así sea.
Plegaria del siglo VIII

¡No a la guerra y al aborto!

lunes, 14 de octubre de 2013

Centro de Gravedad

Para cantarte, mi Señor Jesús, ¡cómo me gustaría
tener ojos de águila, corazón de niño y una lengua
bruñida por el silencio!

Toca mi corazón, 
Señor Jesucristo; tócalo 
y verás cómo despiertan 
los sueños enterrados 
en las raíces humanas 
desde el principio del mundo.

Todas nuestras voces se
agolpan a tus puertas.
Todas nuestras olas 
mueren en tus playas.
Todos nuestros vientos 
duermen en tus horizontes.


 Los deseos más recónditos, 
sin saberlo, te reclaman y te invocan. 
Los anhelos más profundos te buscan impacientemente.

Eres noche estrellada, música de diamantes,
vértice del universo, fuego de pedernal.
Allí donde posas tu planta llagada, allí el planeta
arde en sangre y oro.
Caminas sobre las corrientes sonoras y por
las cumbres nevadas.
Suspiras en los bosques seculares.
Sonríes en el mirto y la retama.
Respiras en las algas, hongos y líquenes.

Por toda la amplitud del universo mineral y
vegetal te siento nacer, crecer, vivir, reír, hablar.
Eres el pulso del mundo, mi Señor Jesucristo.
Eres Aquel que siempre está viniendo desde las
lejanas galaxias, desde el centro ígneo de la tierra,
y desde el fondo del tiempo; vienes desde siempre,
desde hace millones de Años-Luz.
En tu frente resplandece el destino del mundo y en
tu corazón se concentra el fuego de los siglos.

Deslumbrado mi corazón 
ante tanta maravilla,
me inclino para decirte:
Tú serás mi camino y mi luz, 
la causa de mi alegría,
la razón de mi existir y el 
sentido de mi vida, mi brújula
y mi horizonte, mi ideal, 
mi plenitud y mi consumación.
Fuera de Ti no hay nada para mí.
Para Ti será mi última canción.
¡Gloria y honor por siempre a Ti, Rey de los siglos!
Encuentro, N° 1 – P. Ignacio Larrañaga

¡No a la guerra, ni al aborto!

miércoles, 9 de octubre de 2013

Reconocer la grandeza del Creador


El 30 de septiembre se celebra la fiesta de San Jerónimo,
Traductor de la Biblia al latín, al reconocer que la
gente de su época, ya no hablaba griego.

Con silencio y equilibrio, “La Biblia dice:

“CALLA, Y SABRÁS QUE SOY DIOS”.


Salmo 8
Señor Dios Nuestro, 
¡Qué admirable es tu 
nombre en toda la tierra!
Cuando contemplo el cielo,
Obra de tus dedos,
la luna y las estrellas 
que has creado,
¿Qué es el hombre para 
que te acuerdes de él,
el ser humano para 
darle poder?

Lo hiciste inferior 
a los ángeles, lo coronaste 
de gloria y dignidad,
le diste el mando
sobre las obras de tus manos,
todo lo sometiste bajo sus pies.

Rebaños de ovejas y toros,
y hasta las bestias del campo,
las aves del cielo, lo peces del mar,
todo lo sometiste bajo sus pies.


Es la Santa Biblia el libro de siempre, actualizado,
que no necesita presentación.

 “La Biblia no enseña cómo va el cielo, sino cómo se va al cielo”.
San Agustín 

Otra riqueza en mi espiritualidad 
El Devocionario Encuentro de el 
Padre Ignacio Larrañaga 

¡No a la guerra, ni al aborto!

martes, 8 de octubre de 2013

Jonás 3,1-10

¡Señor! Ten misericordia de Colombia
“De nuevo vino la palabra del Señor sobre Jonás: "Levántate y vete a Nínive, la gran ciudad, y predícale el mensaje que te digo." Se levantó Jonás y fue a Nínive, como mandó el Señor. Nínive era una gran ciudad, tres días hacían falta para recorrerla. Comenzó Jonás a entrar por la ciudad y caminó durante un día, proclamando: "¡Dentro de cuarenta días Nínive será destruida!" Creyeron en Dios los ninivitas; proclamaron el ayuno y se vistieron de saco, grandes y pequeños.
Llegó el mensaje al rey de Nínive; se levantó del trono, dejó el manto, se cubrió de saco, se sentó en el polvo y mandó al heraldo a proclamar en su nombre a Nínive: "Hombres y animales, vacas y ovejas, no prueben bocado, no pasten ni beban; vístanse de saco hombres y animales; invoquen fervientemente a Dios, que se convierta cada cual de su mala vida y de la violencia de sus manos; quizá se arrepienta, se compadezca Dios, quizá cese el incendio de su ira, y no pereceremos." Y vio Dios sus obras, su conversión de la mala vida; se compadeció y se arrepintió Dios de la catástrofe con que había amenazado a Nínive, y no la ejecutó”. Jonás 3,1-10. Casa para tu fe Católica-


Las Alianza de Dios
En el actual comportamiento 
de la humanidad, nos haría 
falta asimilar las palabras 
del Señor a Jonás y la 
actuación de Jonás, en 
obediencia al Señor. 

Una respuesta de humildad 
de parte del rey de Nìnive:

“Examen de conciencia, 
contrición de corazón y 
propósito de la enmienda".
  

¡No a la Guerra, ni al aborto!
Dureza de corazón

Sabemos que el Señor nos acoge?

HOY...
Recopilación de la Homilía del P. Salomón Bravo
en la Eucaristía de las 7 a.m.

Si en el Evangelio de Lucas, para el día de hoy, nos
preguntamos quién acogió a Jesús?
Se nos dice que Marta, pues “acoger” a una
persona como huésped, es atenderlo mientras dure su
permanencia, con todas las normas de cortesía.
Por tanto, Marta cumplía con los deberes de ama de casa,
parte sana y saludable, de buena intención.

Si continuamos preguntándonos si María acogió al Maestro,
pensaríamos que sí, espiritualmente hablando, ella se sienta
a escucharlo y seguir su Palabra.

Las dos hermanas cumplieron, se complementaron
con la atención al Señor.
Si profundizamos –quién acoge a quién- obvio es
Comprender que el Señor acogió a estas dos mujeres para
escuela de sus discípulos, en su camino a Jerusalen.


Nosotros no acogemos al Señor.
Es el Señor quien nos busca, Quien nos escoge.

Claramente el Evangelio nos dice:
“Entró el Señor en una aldea”
Cuya aldea puede ser tu corazón, tu alma.


¡No a la Guerra, ni al aborto!

lunes, 7 de octubre de 2013

Oración de abandono

“Tómame
Señor Jesús, con todo lo que soy, con todo lo que 
tengoy lo que hago, lo que pienso y lo que vivo.

Tómame en mi espíritu, para que se adhiera a Ti;
en lo más íntimo de mi corazón, 
para que solo  te ame a Ti.

Tómame, Dios mío, en mis deseos secretos, para 
que sean mi sueño y mi fin único, mi total adhesión 
y mi perfecta felicidad.

Tómame con tu bondad, atrayéndome a Ti.
Tómame con tu dulzura, acogiéndome en Ti.
Tómame, con tu amor, uniéndome a Ti.
Tómame, mi Salvador, en tu dolor, tu alegría, 
tu vida, tu muerte, en la noche de la Cruz, 
en el día inmortal de tu Resurrección.

        Tómame con tu poder,
Foto tomada por Oscar 

Devocionario Encuentro N° 35
–Padre Ignacio Larrañaga.

¡No a la guerra, ni al aborto!
elevándome hasta Ti;
Tómame con tu ardor, 
inflamándome de Ti,
Tómame con tu grandeza, 
perdiéndome en Ti.

Tómame para la tarea 
de tu gran misión, 
para una entrega total
a la salvación del prójimo 
y para cualquier 
sacrificio al servicio 
de tus hermanos.

Tómame, oh Cristo, 
mi Dios, sin límites y sin fin.

Toma lo que puedo ofrecerte; 
no me devuelvas jamás lo que tomaste, de manera que un día 
               pueda poseerte a Ti 
               en el abrazo del cielo, 
               tenerte y conservarte  
               para siempre. Amén”.